jueves, diciembre 21, 2006

LA MOLÍ, 3 - CAMELFALL, 2

UNA NUEVA ESPERANZA

Apasionante partido nos ofrecieron molineros y camelleros en la noche de ayer, haciendo honor a la igualdad de ambos equipos, como ya quedó patente en el encuentro de la primera vuelta. Ajeno a su pobre situación en la clasificación, Camelfall puso las cosas muy difíciles a los líderes y jugó con enorme seriedad y competitividad, demostrando que su calidad es superior a la que los resultados indican. Victoria por la mínima para La Molí, que contaron con una decisiva doble parada de su portero en los minutos finales, en los que el equipo camellero tuvo en un doble penalty y en su rechace la magnífica ocasión para igualar el encuentro. Con esta victoria, seguirán primeros a la espera de los partidos aplazados de la Peña Españolista.


Camelfall contó con dos reservas de excepción, como el reputado capitán del Atlético Popolina y el artillero Adrián, que aportaron bastante equilibrio al equipo camellero. En un inicio agitado, La Molí salió con fuerza para solventar rápido el partido, pero se topó con la consistencia de un rival más concentrado y con el gol de Javi que adelantaba a los camelleros en el marcador. Jugada rápida por banda izquierda del siempre expeditivo deportista de Cornellá, que se gira para buscar a un compañero y, al no encontrar desmarques, da la vuelta y sorprende al portero molinero con fuerte disparo raso pegadito a su poste derecho.

Ese gol trempanero cambió los planes de La Molí, que no lograba de encontrar una constante de juego para desesperación de su media y que chocaba una y otra vez contra la defensa rival y contra un espléndido Taravilla que realizó enormes paradas de mérito, incluso con la cara, a los disparos locales. Solo un error garrafal en la salida de balón de Ortega, que propició una intercepción y su posterior contra por banda derecha, hizo posible el gol del empate, gracias a un disparo dentro del área ante el cual no pudo hacer nada el portero sagrerense de Camelfall. 1-1.

El empate descentró un poco al equipo ribereño, que, pese a todo, no perdió el sitio. Ni si quiera cuando otra contra por banda izquierda acabó con un pase-rebote al centro del área y, con derechazo cercano, al palo derecho del portero, la Molí se adelantaba en el marcador (2-1). Ramon, que poco antes había enviado rozando el poste una espectacular volea a la salida de un corner, recorría la banda sin descuidar la posición y cubriendo a la perfección las subidas del rival; Ortega y Javi se asentaban en la defensa, mantenían a raya a la delantera contraria y recuperaban bastantes balones, mientras que la pareja de tullidos delanteros provocaban faltas y abrían huecos. Con Adrían pegando la pelota al pie y Pau tapando espacios, La Molí acabó cediendo la posesión a Camelfall hasta el final del primer tiempo. No era de extrañar que, poco antes de la media parte, el equipo camellero obtuviera el empate. Balón recuperado en la medular, Adrián regatea al portero por su derecha cerca del borde del área y con pierna izquierda establece de nuevo la igualdad: 2-2. Más emoción, imposible.

El segundo tiempo mantuvo la dinámica del primero. A pesar de que permitían disparon lejanos, que Taravilla mantuvo lejos de la red, Camelfall mantenía la defensa ordenada, corrigiendo relativamente bien los clamorosos desajustes del inicio del encuentro. Eso mantuvo el equilibrio entre ambos equipos hasta el final, que solo se resolvería desde el punto del doble penalty. Hasta entonces, el juego se volvió abrupto, con constantes faltas, lo que generó ciertas dosis de nerviosismo en La Molí, al cual les costaba cada vez más llegar a la portería contraria. Su desesperación quedó reflejada en un conato de tangana tras una aguerrida lucha por la posesión del balón y, sobretodo, en sus constantes protestas al arbitro, demasiado influido en determinadas decisiones. Y fruto de ello, una falta muy rigurosa cuando el delantero molinero ya perdía el balón, supuso el doble penalty que desequilibraría la balanza. Taravilla, fantástico todo el partido, no pudo reaccionar a tiempo al potente disparo por la izquierda del delantero molinero. 3-2 y cuatro largos minutos por jugar.


Con Chus y Porro presionando arriba, Camelfall consiguió encerrar a los locales en su campo. Como resultado, dos faltas seguidas sobre el delantero de la rodillera, daban paso a una inmejorable ocasión de empate para los camelleros. La responsabilidad del doble penalty corrió a manos de Javi, que lanzó un potente disparo raso que despejó el portero con el pie. El rechace fue a parar al mismo Javi, que se sacó un disparo a bocajarro, que el portero molinero desvió milagrosamente levantando institivamente el pie a la altura de la cintura, evitando así el que hubiera sido un justo empate. Instantes después, el arbitro señalaba el final antes de que el partido siguiera con el tono bronco de la segunda parte.

Con este resultado, Camelfall permanece en antepenúltimo lugar con 8 puntos, pero cierra el año con un espléndido partido que debiera haber merecido mejor suerte. No son pocos los que creen que, con este juego y un poco más de condición física, el equipo camellero ascenderá puestos en la clasificación y podrá aspirar a cotas más altas, dado que espíritu no le falta como ha dejado patente en los partidos contra los rivales más fuertes. Solo puede esperarse que 2007 les resulte un será un año mejor.

MERRY CHRISTMAS A TODOS!!!