CAMELFALL, 1 - SANTS ESCREMA, 5

PEOR TODAVÍA

Bon dia!. Nuevo espantoso recital camellero, que anoche fue ridiculizado en una horrenda primera parte. Sants Escrema se tomó una justa venganza por el primer partido de Liga, que acabó 3-7 a favor de Camelfall y devolvío el tanteo a un equipo azulado totalmente ofuscado en los primeros 20 minutos. Errores de concentración, débiles marcajes, malas defensas en el uno contra uno. Un triste espectáculo que comenzó a los 5 minutos: pérdida de balón en el medio del campo, ni Porro ni Javi aciertan a despejar, el delantero rival se lleva el balón tras dos rebotes y se planta ante Taravilla, que poco puede hacer. 0-1. Los mismos protagonistas repetirían acción poco después. El figurita de Sants le hace una sotana a Javi y se planta ante Miguel. Se la cruza con el interior al palo izquierdo y el 0-2. Porro, impotente, lo siguió en primer plano. El resto del equipo tampoco anduvo nada fino. Las llegadas al contraataque de Sants se repetían. Los camelleros dejaban muchos espacios y eso permitía correr a los delanteros visitantes. Con impotencia a raudales, Camelfall solo frenaba al rival con un juego muy agresivo que fue penalizado con multiples faltas, algunas muy llamativas, otras inexistentes. De una manera u otras, tampoco importaba mucho: Sants apenas sufría en defensa y una nueva contra supuso otro mano-a-mano ante Taravilla, con tan mala suerte que Felix, uno de los fichajes camelleros, introdujo en la portería el rechace alto de su propio portero. 0-3. Y solo fue cuestión de minutos que, fruto del ambiente cargado, una polémica y sonora falta fuea castigada con un doble-penalty que dejaría el 0-4 en el marcador antes del descanso. La segunda parte fue totalmente diferente... pese a que la primera jugada fue un calco de lo que pudimos ver en la primera. Jugada a la contra por banda izquierda, pase la centro, controla el delantero de Sants y, ante la presión del defensa camellero, consigue levantar el balón ante la salida del portero azulado. La pelota golpea en poste contrario y entra mansamente. Era el 0-5 que podía llevar a una auténtica goleada de escándalo (si ya no lo era), pero Camelfall reaccionó. Gracias a que Sants se echó atrás, los camelleros tomaron en control del balón y buscaron en gol. Presionando arriba, conseguían una y otra vez llevarse el balón, si bien, la definición fue completamente nula. Una y otra vez, los disparos se marchaban fuera de los tres palos, en una sucesión de desaciertos que reducían la efectividad al mínimo. El único gol camellero llegaría después de un potente lanzamiento raso de Javi, tras una falta estratégica que le hicieron a él mismo tras una recuperación de balón. Hasta ahí llegó toda la puntería de Camelfall. El resto, todo un archivo de despropósitos y una amplia gama de fallos ante la portería rival que el Secretario Técnico, con sus recursos psicológicos, no pudo evitar. Al final, 1-5 y nuevo fiasco de unos impotentes Camelfall inmersos en una dura crisis de la que confiamos que salga pronto, muy pronto.