CAMELFALL, 3 - LA MOLI, 3

CON DOS COJONES!!!

El partido que deparó a dos de los equipos de la zona medio alta del grupo no pudo ser más emocionante. En un encuentro intenso, los camelleros del Llobregat sumaron un nuevo punto gracias a un gol in extremis de Alberto, que cerraba una segunda parte en la cual las cosas se les pusieron muy cuesta arriba. La Molí llegó a tener una ventaja de dos goles a falta de poco más de 7 minutos, pero, sin embargo, no pudo aguantar el empuje final de Camelfall, un equipo con mucho ímpetu aunque a veces falto de concentración, por lo que se llegó a un empate final a tres que bien podría calificarse de justo.

Los camelleros del Llobregat fueron poseedores del balón durante la primera parte ante un equipo bien organizado detrás y que apenas dejó espacios. Esto creó muchas dificultades a la circulación de balón camellera, que acababa muchas jugadas con pérdidas de balón y disparos imprecisos. Los molineros no inquietaron en demasía la portería Camelfall, pero fueron capaces de realizar peligrosas contras, si bien los resultados fueron infructuosos. Durante muchos instantes del partido, Camelfall se estrellaba una y otra vez ante la ordenada defensa molinera, que parecía marcar el ritmo lento de partido que les interesaba, a pesar de los denodados esfuerzos del equipo atacante. Un par de ocasiones claras por ambos lados, con disparos que rozaron el poste (por fuera), fueron lo mejor hasta que una triangulación por la banda izquierda del ataque camellero acabó con el gol de Javi. El disparo, algo escorado dentro del área pequeña, entró pegado al palo, entre las piernas del portero. Éste era un gol que hacía justícia al control de balón de los camelleros y a su mayor búsqueda de la portería rival. Poco después llegaba la media parte.

El segundo tiempo prometía ser muy igualado. A pesar de la ventaja camelfall, las fuerzas estaban muy equilibradas y ningún equipo estaba imponiendose al otro, ni por juego ni por físico. El 1-0 podía haber tranquilizado a los locales y obligar a los molineros a arriesgar, pero el partido se reanudó igual que al inicio: intranquilidad para Camelfall y Moli marcando el ritmo. Solo era cuestión de tiempo que fructificase alguna contra y así ocurrió. Un saque de banda del camellero Juanma hacia el centro del campo, fue interceptado por un defensa que se adelantó a dos rivales que se molestaron mútuamente cerrando el campo. En carrera, el jugador molinero se sacó un disparo aproximándose al área que, a pesar de la estirada de Taravilla, dió en el poste y acabó entrando para desesperación del equipo. Era el empate a uno...

...Y el inicio de una pájara monumental para los camelleros. Poco minutos después, una internada por la derecha de la defensa camelfall tras una pérdida de balón acabó con un disparo que acabó en la red. Taravilla, que hasta entonces había estado correcto ante las escasas ocasiones del rival, poco pudo hacer. El desconcierto reinante entre los locales era tal que los dos saques de centro fueron sendos disparos desde propio campo que no inquietaron la porteria rival. Inmediatamente después, una nueva contra de Molí dejó a uno de sus delanteros en un mano a mano con el portero camellero, ante la mirada atónita de dos de los defensas, incapaces de reaccionar. El marcador se ampliaba a 1-3. En 5 minutos, La Molí le había dado la vuelta al partido y lo había dejado casi sentenciado. No obstante, cuando parecía más tocado, Camelfall reaccionó.

Hasta donde la condición física permitió, los camelleros no solo se fueron arriba sinó que comenzaron a presionar agresivamente la salida del balón. Esto propición varias jugadas claras, como la del reaparecido Porro, que no supo culminar una recuperación de balón en la zona de 3/4 de la Molí. Quién sí acertó fue Orteguilla, instantes después. El pressing en el medio del campo permitió al cornellense hacerse con un balón y golpearlo con rabia hacia la portería visitante. El esférico, pese a tocarlo el portero con los pies, acabó entrando bajo el arco fruto de la fuerza que llevaba. Esta culminación, tras tantos momentos de incerteza, dió ánimos a Camelfall que fue con todo en la búsqueda del empate. Cuando parecía que las fuerzas llegaban a su límite, una saque de banda dentro del área provocó una mala salida del portero molinero, estorbado por un defensa y un rival. El rechace fue a los pies de Alberto, de cuyo golpeo salió el balón dirección a la portería y en cuyo poste rebotó. Más rápido que sus rivales, el mismo Alberto fue a buscar el rebote y, ante las quejas de sus contricantes, consiguió introducir el esférico en la red. Era el 3-3 a falta de escasos 2 minutos para el final. El coraje de Camelfall, así como su espíritu de lucha, había dado finalmente sus frutos. Sin mucho tiempo más, el marcador así quedaría. Y los jugadores tomaron, exhaustos, el camino hacia los vestuarios. Se habían más que ganado la cervecita postrera.

Este empate entre La Molí y Camelfall les mantiene en 3º y 4º lugar en la tabla, ambos con 7 puntos, y permite a la Peña Españolista y a Sants Escrema liderar la clasificación con 2 puntos más. En las próximas semanas, Camelfall se enfrentará a los dos colistas antes del esperado encuentro con la Peña Españolista, mientras que la Molí, que perdió la pasada semana 5-2 con los pericos, tendrá que verse las caras con Ewals y, anteriormente, con el verdugo de Camelfall hace 2 semanas, el Pinturas Olonam. En la última jornada de la primera vuelta se topará con Sants Escrema. Quedá así abierta la lucha por la primera plaza, que tiene a la Peña Españolista como principal candidata. No obstante, a tenor de la aguerrida competencia que le espera por parte de rivales de tan esforzado nivel como el visto ayer, nada está decidido.

El próximo jueves, más.